Por: Comunicaciones CIEC.
Entre el 21 y el 23 de agosto, más de 1.000 educadores de Honduras han participado en el ciclo de conferencias ofrecido por la Federación Nacional de Centros Educativos Católicos de Honduras (FENCECH), con el apoyo de la Confederación Interamericana de Educación Católica (CIEC), sobre la pedagogía del cuidado.
Las actividades formativas, coordinadas por el P. Horacio Macal, SDB, Presidente de la FENCECH, contaron con la participación del Secretario General de la CIEC, Óscar Pérez Sayago, quien desarrolló esta temática con los educadores de tres ciudades: San Pedro Sula, Comayagua y Tegucigalpa, donde también se contó con la participación del arzobispo de la capital del país, Mons. José Vicente Nácher.
Por una alianza global
“El tema del cuidado se presenta como epocal, dada la situación crítica por la que pasan la humanidad y la tierra”, comentó Pérez Sayago al inicio de su conferencia en Tegucigalpa, al destacar que “se hace necesario hacer una alianza global para cuidar unos de otros y de la tierra, o corremos el riesgo de autoderstruirnos y destruir la diversidad de la vida”.
Para el directivo laico, “el cuidado permite que las crisis se transformen en oportunidades de purificación y de crecimiento, y no en tragedias fatales”. De ahí que el cuidado sea “absolutamente necesario en todas las esferas de la existencia, desde el cuidado del cuerpo, de los alimentos, de la vida intelectual y espiritual, de la conducción general de la vida, hasta para atravesar una calle con mucho movimiento”.
Una pedagogía urgente
Al constatar que “la urgencia de una pedagogía del cuidado todavía no ha entrado en la conciencia colectiva”, Óscar Pérez Sayago subrayó seis líneas de trabajo a modo de imperativo:
- Recuperar la razón sensible y cordial que suscita el sentimiento de pertenecer al universo, en complemento con la razón intelectual y analítica.
- Superar el antropocentrimos y el sociocentrismo, como si solo como seres humanos y como sociedad tuviéramos valor.
- Incorporar los principios básicos de la ecología: todo está relacionado y todo tiene que ver con todo, en todos los momentos y lugares.
- Conocer a nuestros hermanos y hermanas de la comunidad de vida, es decir, reconocer la importancia del sol, conocer nuestra flora y nuestra fauna…
- Desarrollar una espiritualidad cósmica. Ella nos hace sensibles a los mensajes de belleza, de grandeza y de generosidad que nos llegan de todas partes.
- Cultivar una ética del cuidado que atraviesa todas las disciplinas e impregna todas las actitudes.
El balance de los eventos formativos coordinados entre FENCECH y CIEC es muy positivo. “Esperamos que la escuela católica siga fortaleciendo su liderazgo en torno a la pedagogía del cuidado y a través de acciones concretas y colaborativas”, concluyó Óscar Pérez Sayago, Secretario General de la CIEC.
Fuente: CIEC.
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